La preventa de monedas de colección digital está destinada a fomentar el interés por las criptomonedas entre los jóvenes, así como a aportar información para su investigación y desarrollo.
El banco central de Lituania es el último en explorar la posibilidad de desarrollar una moneda digital de banco central (CBDC) en medio de la pandemia.
Sin embargo, el país parece estar adoptando un nuevo enfoque. En lugar de una CBDC per se, Lituania realizó el 9 de julio una preventa de monedas de colección digital, que llamaron LBCOIN.
El Banco de Lituania (BoL) ha estado trabajando en estos tokens desde marzo de 2018. Este lanzamiento marca su entrada en la fase final de la prueba.
En esta etapa experimental, 24 000 LBCOIN digitales irán a la preventa. Los tokens vendrán en paquetes de seis y se venderán por 99 €.
Cada token tiene un retrato de uno de los 20 signatarios de la declaración de independencia del país que se firmó en 1918. Estos retratos se han dividido en seis categorías: presidentes, diplomáticos, industriales, sacerdotes, académicos y servidores municipales.
Los coleccionistas pueden intercambiar tokens y luego intercambiar conjuntos específicos, definidos como un grupo de tokens de cada una de las seis categorías. A cambio, recibirán una moneda de plata física de un valor aproximado de 20 €.
El BoL aclaró que no se alentará el uso de estos tokens como medio de pago; su objetivo principal es “involucrar a más personas, especialmente los jóvenes, en la colección de monedas”, mientras obtienen una “valiosa experiencia y conocimiento en el campo de las monedas digitales”.
Muchos países, como Japón, los Emiratos Árabes Unidos, EE. UU. y China han estudiado la posibilidad de integrar la tecnología blockchain con los sistemas gubernamentales y financieros. Esto se debe a que blockchain ofrece niveles mitigados de riesgo, mejor transparencia y descentralización.
Alexandre Stachtchenko, cofundador de una consultora sobre tecnologías blockchain llamada Blockchain Partner, cree que la tecnología es importante porque también es capaz de abordar las deficiencias de Internet.
“A diferencia de un correo electrónico, una vez que has enviado un bitcóin, ya no puedes acceder a él”. explicó, refiriéndose a la capacidad de blockchain para transferir valor digitalmente.
Stachtchenko elogió el enfoque del Banco de Lituania por ser “interesante” y “sin pretensiones”, y cree que el proyecto impulsará el debate sobre las criptomonedas y ayudará a las personas a darse cuenta que hay un “elefante en la sala”.
Otros desarrollos en la industria de la criptografía en todo el mundo están empujando a los gobiernos y otras entidades por igual a cuestionar la viabilidad de mantener las formas tradicionales de moneda en lugar de establecer otra junto a ellas.