Los legisladores creen que las enmiendas ayudarían a los contribuyentes criptográficos a adherirse a las políticas fiscales locales
El jueves pasado, cuatro miembros de la Knesset del partido nacionalista Yisrael Beiteinu presentaron un proyecto de ley que efectivamente pondría fin al impuesto israelí sobre las ganancias de capital del 25% sobre el bitcóin. Lo haría redefiniendo ciertas “monedas digitales distribuidas” como moneda, en lugar de su clasificación actual como activo imponible.
La nueva designación propuesta se aplicará a las criptomonedas que tienen una capitalización de mercado de mil millones de shekel (alrededor de 288 millones de dólares) o más, una red de emisión distribuida, una historia de origen independiente y un propósito general de usuario.
“La realidad regulatoria en Israel no se adapta a la realidad existente en el campo. [Las monedas digitales] seguirán siendo un motor de crecimiento que permitirá que la industria israelí de alta tecnología prospere y se desarrolle”, se lee en el proyecto de ley.
Según los autores del proyecto de ley, Oded Forer, Evgeny Sova, Yulia Malinovsky y Alex Kushnir, bitcóin y algunas otras criptomonedas cumplen con estos criterios.
Los legisladores escribieron que esta aclaración ayudará a crear un entorno propicio para las criptomonedas en el futuro.
“Esta claridad regulatoria creará certeza comercial y permitirá que más monedas digitales ingresen al mercado israelí”, escribieron.
La medida declaró que definir las criptomonedas como monedas “reales” ayudaría a los israelíes que poseen bitcoines con sus responsabilidades fiscales y haría de las criptomonedas un mecanismo de pago más atractivo.
Si bien la industria de las criptomonedas está estableciendo lentamente sus raíces en el país, el partido Yisrael Beiteinu es solo una parte de la oposición parlamentaria de Israel. La aprobación del proyecto de ley es poco probable si los miembros de la mayoría no expresan su apoyo.
Hasta el momento, las criptomonedas en Israel están gravadas con un impuesto del 25% sobre las ganancias de capital. Si las enmiendas se aprueban e implementan, los vendedores de criptomonedas estarán obligados a presentar un informe fiscal dentro de los 30 días posteriores a las transacciones y pagar un anticipo sobre la tasa impositiva por ganancias de capital.
En agosto de 2019, los traders de criptomonedas dentro del país presentaron una serie de demandas contra instituciones financieras debido a restricciones que se habían impuesto previamente a sus cuentas bancarias. Los traders exigieron al Banco de Israel y a otros bancos comerciales que “hicieran pública su política en este asunto”.
Según Mei Rosenfeld, presidente de la asociación Bitcoin, el Banco de Israel había rechazado su solicitud porque infringía “secretos comerciales”.