Se presentó una demanda contra Ellis Pinsky, y su grupo de asociados, por robar millones de dólares de cuentas de criptomonedas.
Para sus amigos y familiares, Ellis Pinsky parecía un gamer adolescente común. Según los documentos judiciales, las personas cercanas a él simplemente asumieron que tuvo suerte con el bitcóin.
Poco sabían que las actividades Pinsky lo ubicarían a la cabeza de una operación delictiva que se apoderó fraudulentamente de millones de dólares en criptomonedas.
Pinsky tenía 15 años cuando supuestamente comenzó a implementar el esquema fraudulento, que usó para robar más de 100 millones de dólares en criptomonedas. La demanda federal lo señala como “el cabecilla” de “una sofisticada ola de delitos cibernéticos.”
Un informante le dijo al New York Post que el mejor amigo de Pinsky pensaba que su nueva riqueza la había obtenido gracias a inversiones en bitcóin y acciones, mientras que sus padres creían que había tenido una suerte increíble al ganar bitcoines en juegos competitivos.
Pinsky, que ahora tiene 18 años, está siendo demandado por el gigante de las criptomonedas Michael Turpin. Según la demanda, él y otras personas no identificadas lo engañaron para que perdiera 23 808 125 dólares. El informe alega que Pinsky también robó decenas de millones a otros que no han sido identificados en la denuncia.
“A pesar de su apariencia, Pinsky y su grupo son, de hecho, genios informáticos malvados con rasgos sociópatas que arruinan despiadadamente la vida de sus inocentes víctimas y se jactan alegremente de sus robos multimillonarios.” Alega la demanda.
Además de los honorarios de abogados y otros costos relacionados, Turpin busca una compensación triple por los daños sufridos; tres veces la cantidad del dinero real perdido.
Turpin reveló que su apodo para Pinsky es “El pequeño Al Capone”, debido a su actividad de “gángster critpográfico.”
Se presume que Pinsky y su grupo de piratas informáticos obtuvieron acceso a las computadoras de sus víctimas y, posteriormente, a sus cuentas de criptomonedas. Luego robaron y lavaron los fondos. La demanda alega que en algunos casos incluso llegaron a robar información personal para obtener acceso a estas cuentas.
A partir de ahí, según los informes, Pinsky gastó la riqueza obtenida gracias a su actividad delictiva en las noches de Nueva York y relojes caros.
Las operaciones de Pinsky se detuvieron después de que Nicholas Truglia, un cómplice, fue arrestado por otro robo de criptomonedas en 2018. Si bien Turpin demandó a Truglia por separado, Truglia identificó a Pinsky y a otros como sus complices en el robo de las criptomonedas.
Noam Biale, el abogado de Pinsky, enfatiza que éste era solo un niño en el momento del robo.
“Es profundamente desafortunado que el Sr. Turpin haya decidido entablar una demanda, llena de difamaciones y acusaciones infundadas, sin otro propósito imaginable que el rencor,” dijo Biale.